lunes, 25 de julio de 2011

Satanismo en exteriores: los diplomáticos de Noruega asisten a clases de Black Metal.

La antigua Noruega.

    Cuando uno piensa en  Noruega, las primeras cosas que se le vienen a uno a la cabeza pueden ser el sabroso salmón, bucólicos fiordos, belicosos vikingos o las majestuosas auroras boreales.

   Pero los tiempos cambian, y en los últimos años éste país ha estado exportando al mundo un producto menos conocido: el Black Metal.

¿Futura orientación de la bandera?
   Tal es el número de bandas formadas en éste país que cultivan el género, y el interés que despierta dentro y fuera de sus fronteras, que el Ministerio de exteriores ha decidido tomar cartas en el asunto e incluir un breve curso especializado en este género musical dentro de la carrera diplomática. El objetivo de ésta medida es evitar que le saquen los colores al cuerpo diplomático cuando se le pregunte por el tema en el extranjero.

   El Black Metal es un subgénero extremo del Heavy Metal que se caracteriza por sus letras anticristianas con temas que abarcan desde la misantropía y la mitología escandinava hasta el satanismo o el ocultismo.

   El movimiento vivió su momento más álgido en los años noventa. Unido a la popularidad de las bandas, éstas se vieron implicadas en actos violentos, que incluyen quema de iglesias (en noruega abundan las construidas con madera), suicidios e incluso asesinatos entre miembros de bandas rivales.

¡Bienvenido a Noruega!.
   A pesar de su mala prensa, el gobierno no ve ningún tipo de problema para que los diplomáticos reciban clases de Black Metal. Es más, lo consideran una necesidad. "En Italia, Japón o Francia hay gente joven que aprende noruego sólo para descifrar las letras". De hecho, éste género musical "se ha convertido en producto de exportación, por lo que es importante que los futuros diplomáticos se interesen por él", explica Steinar Lindberg, director general adjunto del servicio de formación del Ministerio de Exteriores.

Un catedrático de Black Metal
   El objetivo no es fomentar ni promover esta tendencia, sino que lograr que los futuros representantes del país dominen la cultura propia en "toda su diversidad".

   Una de la banda de más éxito del género es sin duda Dimmu Borgir. Sin embargo ésta banda está un tanto mal vista entre sus colegas por salirse de las pautas de lo que llaman "Auténtico Black Metal Noruego". Abandonaron su lengua materna noruega en favor del Inglés en sus letras, al mismo tiempo que adoptaban un sonido sinfónico más "para todos los públicos", añadiendo voces claras a las típicas graves y guturales del género. Veámoslos en acción:

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